Bienvenido míster Snowden
Alicia
Freilich
23
de Julio 2013
"Como
alcalde vuestro que soy os debo
una explicación y la explicación que os debo, os
la voy a pagar".
Bienvenido míster
Marshall, filme español dirigido por Luis García Berlanga, 1953.
Si
usted Edward Snowden, defensor
a ultranza de los derechos humanos, antes de refugiarse aquí, hace un cursito
en Cuba, llega perfecto porque
destrezas adquiridas en la
CIA, NSA junto con las de la KGB actualizadas, son
la fórmula ideal para que siga de espía
doble agente y también ayude a más de la mitad de Venezuela, es decir, a los electores del 14 de abril pasado, votantes contra este régimen, calificados
de pitiyanquis, derecha vendida al imperialismo norteamericano, traidores a la
patria, canalla mediática, burguesitos, la nada, en fin, le conviene
un traductor fijo. Es la costumbre de fraude y ofensa que lesiona
el derecho humano de verificar y dignificar el resultado fiel de cada acción ciudadana
individual.
Norma
de igualdad y fraternidad
en su lar, Estados Unidos.
Si
se disfraza de técnico del
G2, confiable especialista
en mantenimiento de sofisticada
maquinaria electrónica, puede ingresar fácilmente en el CNE y, al mejor estilo del novelista John Le Carré, cotejar los cuadernos de votación allí ocultos
en copia con el resultado oficial aparatoso de dicho evento hasta
hoy acatado incluso por la OEA. Parece que
esas pruebas originales se encuentran vía La Habana, en nuestro
Tribunal Supremo de Justicia,
nada que ver con la Suprema Corte de su país.
Si
le hacen una versión al inglés del libro de Alfredo Meza sobre el asesinato de Danilo Anderson, fiscal
del Ministerio Público, órgano del Poder Ciudadano, más otras pistas, puede
llegar a los cerebros grises que concibieron
el crimen del personaje, llorado en público por el gobierno de turno. De paso, revelar los nombres de los ejecutores del hecho todavía sin respuesta del sector oficial, conducta que contradice el universal derecho humano a la vida. Con el mismo método conozca libros y artículos de prensa sobre los motivos de fondo que impulsan la saña contra el general Raúl Baduel, el comisario Iván Simonovis, la jueza María Afiuni
y otros presos políticos, de mucha gente perseguida y torturada, violados en el esencial derecho humano a la defensa y libertad con el debido proceso. Consiga un resumen de las informaciones que el veterano comunicador Nelson Bocaranda, el más acosado de los innumerables vigilados colegas, entregó regularmente sobre la enfermedad de Hugo
Chávez Frías, lo compara
con los breves comunicados
de Miraflores más los reportes médicos castristas y da con la verdadera causa del secretismo gubernamental y del PSUV, que atenta
contra el derecho cívico a conocer la salud físico-mental del primer mandatario
y otros funcionarios públicos. Es lo normal en su lugar de origen.
Para
su relax mire por Internet
la película Bienvenido míster Marshall del gran Berlanga y por él mismo renovada
en 2000.
Vea cómo esta obra maestra
de la parodia reveló al mundo la pobreza material y
moral, el terror, la sumisión de funcionarios
mediocres y perversos en la
España franquista, al disfrazar al pueblo con sus mejores galas y falsos elogios de los xenófobos empleados del dictador a los supervisores gringos para lograr ayuda del Plan Marshall que destinó millares
de dólares para reconstruir la Europa de la segunda posguerra y evitar que sucumbiera
bajo dominio soviético.
Con
los términos invertidos así conoce a su
anfitriona, esta revolución soberana cada día más
dependiente de los imperialismos
ruso y chino, mientras
reduce la segura, tradicional
venta petrolera a su nación. Esto
impide ejercer el derecho básico de toda persona de elegir competentes autoridades que le garanticen alimentación, empleo, seguridad, escuela y salud.
En
ficción y realidad el tiro les sale por la culata. ¿Cómo suena
eso en su idioma natal?